5.2.12

LOS BORDES

La vida tiene muchos bordes irregulares. bordes que nos atraen, como el precipicio sobre un cañón, que nos llaman y que nos repelen, como la tapa de una lata abierta ( siempre bien afiladas por cierto).
Existe una tensión entre querer ver el borde, sentirlo, pasar las manos por él, y el deseo de retirarse hacia la seguridad y la comodidad. Nos mostramos indecisos y dudosos. Nos sentamos y consideramos lo que vamos a hacer a continuación. 
Podemos apartar la vista del borde y actuar como si no estuviera ahí, pero sólo podemos hacer eso durante muy poco tiempo, porque al final siempre tenemos que tomar una decisión.